El reciente recorte presupuestal de 33 billones de pesos autorizado por el presidente Gustavo Petro e informado por el minhacienda , Ricardo Bonilla, , ha generado un intenso debate sobre su suficiencia y la situación fiscal del país. Las razones en el contexto actual de las finanzas colombianas son:
- La economía colombiana enfrenta un panorama complicado, caracterizado por una caída en los ingresos tributarios. Según informes, el recaudo hasta septiembre de 2024 fue 8,2% inferior al del año anterior, lo que representa un déficit de $8.9 billones respecto a las metas establecidas. Este contexto ha llevado a la necesidad de ajustar el presupuesto para cumplir con la regla fiscal, que limita el gasto público para evitar un endeudamiento excesivo.
- Diversos analistas económicos y entidades como Corficolombiana y el Comité Autónomo de Regla Fiscal (CARF) han señalado que el recorte de $28 billones es insuficiente. Se estima que, para cumplir adecuadamente con la regla fiscal, se requeriría un ajuste total de 56.2 billones de pesos, lo que significaría un recorte adicional allá del monto ya propuesto. Esta discrepancia resalta que el recorte actual no solo es bajo, sino que también podría dejar al gobierno en una situación financiera comprometida.
El recaudo tributario
Se esperaba recuperar entre 10 y 15 billones de pesos a través de litigios fiscales, pero finalmente se reportó que no se generaron ingresos en esta área. Esto ha llevado a una reevaluación constante del presupuesto y a la necesidad de recortes más profundos.
Las implicaciones del ajuste
Los recortes presupuestales no solo afectan las cuentas del gobierno, sino que también tienen implicaciones directas en sectores vitales para el desarrollo económico del país. La reducción del gasto puede limitar la inversión en áreas críticas como educación, salud e infraestructura, lo que podría frenar el crecimiento económico a largo plazo.
El déficit fiscal
Colombia enfrenta un déficit fiscal significativo. Según estimaciones del Carf, los ingresos del país se ubicarán aproximadamente 74.1 billones de pesos por debajo de lo programado en el presupuesto general de la nación para 2024. Este desajuste se debe a menores ingresos tributarios y a proyecciones económicas que no se han materializado como se esperaba.
Esfuerzo insuficiente
El Carf ha advertido que, para cumplir con la regla fiscal, el gobierno debe ajustar su gasto. Aunque el gobierno ya ha implementado recortes y aplazamientos que suman alrededor de 25 billones de pesos, esto no es suficiente. Se estima que se requieren 31 billones adicionales para alcanzar la meta fiscal. Esto resalta la urgencia de realizar ajustes más profundos en el presupuesto.
Un factor clave en esta situación es la inflexibilidad del gasto público. Aproximadamente el 83.6% del gasto entre 2019 y 2023 fue considerado inflexible, lo que significa que gran parte del presupuesto está destinado a gastos fijos como intereses, pensiones y subsidios, dejando poco margen para ajustes en tiempos de crisis. Esta rigidez limita la capacidad del gobierno para adaptarse a las necesidades fiscales actuales.
Riesgos de Incumplimiento: El incumplimiento de la regla fiscal podría tener consecuencias a largo plazo, la confianza de inversionistas y organismos internacionales, lo que podría incrementar los costos de financiamiento y afectar la estabilidad económica del país. El Carf ha enfatizado que, sin una reducción en el gasto, el gobierno podría enfrentar serias dificultades para mantener un equilibrio fiscal.
Juan Carlos Echeverry, exministro de Hacienda de Colombia,
Ha expresado su preocupación respecto al corte fiscal que plantea el gobierno actual. Su opinión se centra en varios puntos clave que reflejan su análisis crítico de la situación económica del país, estas son:
Ha manifestado que no cree en la efectividad de una nueva reforma tributaria estructural, argumentando que el enfoque del gobierno debería ser fomentar la creación de nuevos negocios y formalizar las transacciones en lugar de aumentar los impuestos. Considera que las reformas tributarias anteriores no han logrado los resultados esperados y que una nueva reforma podría resultar en un aumento adicional de la carga fiscal sobre los ciudadanos y las empresas, lo que podría desincentivar la inversión y el crecimiento económico.
Ha señalado contradicciones en la política fiscal del gobierno. Critica la intención de reducir impuestos a las empresas mientras se busca aumentar la carga tributaria sobre los trabajadores y profesionales; argumenta que esta estrategia es contradictoria y podría llevar a una disminución de la confianza empresarial, lo que a su vez afectaría negativamente la economía.
Enfatiza la importancia de mantener una sostenibilidad fiscal adecuada. Advierte que, si el gobierno no logra equilibrar sus cuentas, podría comprometer los derechos fundamentales de los ciudadanos al no poder garantizar servicios esenciales como salud y educación.
.Es grave la situación que podría vivir Colombia, con los indicadores que marcan amarillo y no se hacen los correctivos. Y el Congreso que? El Contralor general de la Republica ? La Procuradora de la Nacion? Y el auditor ??