Hoy nuestro país, está inmerso en los preparativos de lo que será la  COP 16, es decir la Conferencia de Partes, siendo ésta la décima sexta versión del convenio ambiental de la de la Organización de las Naciones Unidas ONU, más importante que se realiza universalmente y tiene  Colombia el honor  de  ser el anfitrión, por esa razón todos los ojos están puestos en este momento sobre nosotros.

Para tener una idea general, este Tratado o Convenio de Biodiversidad, compuesto por más de 195 miembros que hacen parte de la Organización de las Naciones Unidas,  nació a la vida jurídica en 1993, un año después de  la Cumbre de la Tierra, en la que los Estados Miembros adoptaron un tratado jurídico vinculante, con tres objetivos específicos: 1. Conservación de la Biodiversidad Biológica. 2. Uso sostenible de sus componentes. 3. Participación justa  y equitativa de los beneficios que se derivan de la utilización de los recursos genéticos. Todos sus miembros pertenecen la ONU, el mayor Organismo Internacional, quienes firmaron y hacen parte del mismo, excepto EE. UU. que  asiste como delegado. Esta asamblea de la Conferencia, se realiza cada dos años de manera rotativa y equitativa entre las cinco regiones establecidas que corresponden a los cinco Continentes, en la que se toman decisiones sumamente importantes, que van desde discusiones del futuro del Tratado, implementación de las obligaciones de los estados miembros y la administración del mismo. Hay que anotar que la presencia de Comunidad Internacional a estos eventos es numerosa, allí asisten además de Jefes de Estado, Delegados, Organizaciones Gubernamentales, Pueblos Indígenas, Sociedad Civil, Organizaciones Privadas, entre otros.

Todos debemos entender que es el gran proyecto ambiental de Protección de la Biodiversidad para el mundo, siendo de trascendental importancia para Colombia, por su  riqueza megadiversa, que debe fortalecerse y generar unos resultados. Para esta Asamblea en Colombia, fue escogida  la Región del Pacifico  que incluye los Departamentos de Valle del Cauca, Choco, Cauca y Nariño, por su gran biodiversidad y cuyo epicentro es el Distrito de Cali, a realizarse en este año 2024, entre los meses de septiembre y octubre, en el que pueden participar de manera activa y bien informadas, (algunos creen que la COP 16 es una especie de “Copa Deportiva”). Este evento está dirigido a la sociedad civil en general, organizaciones comunitarias de todo género, sin distingo de clases sociales, religión,  raza, sin exclusiones de ningún tipo y por ende podrán hacer parte de los diferentes  espacios, ya sea como aliados, expositores, académicos, científicos, etc., todo referido a la temática ambiental y de acuerdo con la vocación de cada participante. Ya me imagino el Cerro de Cristo Rey inundado de visitantes.

Este logro  para nuestro país, es una gran oportunidad y ha sido resultado de las estrategias del Gobierno Nacional y del Ministerio del Medio ambiente, que de alguna manera pudo influyó, lo cual significa que se estarían  recogiendo los frutos al promocionar y vender  al mundo entero a nuestro  país turísticamente como,  “Colombia el País de la Belleza”, que produjo tanto impacto internacional. He venido participando en algunos eventos de organización sobre el tema, en talleres, mesas de trabajo y reuniones, como ejercicio intelectual de aprendizaje y el objeto de conocer la percepción y necesidades de las comunidades, así como referir proyectos que puedan alimentar la Agenda del Ministerio y permita dar paso a inversiones en los territorios. En estos espacios han asistido fundamentalmente ambientalistas, así como organizaciones de la sociedad civil, comunitarias, ONGs, profesionales y entidades privadas de gran ascendencia económica en la región, que aspiran presentar sus proyectos para eventualmente ser financiados, a lo cual tienen derecho y ojala todos corran la misma suerte, pero sabemos que no es probable por cuanto depende de qué  logre focalizarse como prioritario y también por la escasez de recursos que impiden se cubran todas las ofertas.

El interés del evento mismo es de aplaudir y los caleños debemos interiorizarlo como responsabilidad de todos, además después de los Panamericanos del 71 no tenía la oportunidad Cali de mostrarse al mundo con un evento masivo de tal envergadura y es nuestra obligación acompañarlo y que produjo una gran sinergia entre los habitantes caleños y hoy podríamos hacerla mejor porque tenemos disponible mejores comunicaciones. Considero además que el trabajo no tiene que adelantarse únicamente desde el gobierno del orden Nacional, Departamental, Distrital o Municipal, es necesario que nos sumemos todos, proviene de nuestra obligación ciudadana, aunque sea en lo más mínimo, pero sentirlo como un compromiso personal que beneficie los territorios en los que vivimos, así sea en su pequeño entorno. A futuro disfrutaremos las inversiones en términos macros que se realicen.

¿Me pregunto, además de las inversiones importantes que se harán en los territorios, urbanos o rurales, producto  del evento, luego del mismo, que más nos va a quedar? Ojalá fuera la “disculpa” para  lograr lo más importante, un cambio sustancial en la mentalidad de los ciudadanos, su comportamiento sobre la percepción positiva y el sentimiento afectivo hacia la ciudad, es nuevamente reconocerla como parte nuestra. Interesante regresar a los tiempos de la cultura ciudadana que vivíamos hace años, con otra dimensión porque nada se repite igual y aunque  es obvio que no resolveremos todos los problemas existentes, podemos lograr renovar los sentimientos de identidad, apropiación de los espacios públicos,  identidad con la ciudad, que permita restablecer relaciones sociales más amables, amigables, respetuosas, que nos haga sentir orgullosos de lo que tenemos. De manera que a participar activamente,  ese debe  ser su aporte.

En mi criterio sería pertinente que esta iniciativa de participación colectiva, se expresara y publicitara masivamente, por parte del Doctor Alejandro Eder, Alcalde Distrital de Santiago de Cali, que motivara la expedición de  Decreto  convocando e invitando amablemente a la ciudadanía caleña en general, para contar con el compromiso de todos en este evento ambiental, que genere conciencia social y ambiental entre los caleños.

Beatriz Marín Cataño