Los resultados del PIB del segundo trimestre 2024, evidencian señales de recuperación del crecimiento económico, teniendo en cuenta que abril y mayo mejoraron gracias a la inversión estatal y a los servicios públicos, pero en junio se desaceleraron. El lado positivo tiene que ver con el balance general de crecimiento económico positivo, el 2.1% superando el 0,8% del trimestre anterior y lo negativo es que la industria y el comercio sigue en crisis y que esto podría tener graves repercusiones en la economía colombiana, especialmente en el mediano plazo.
El crecimiento económico tiene a los grandes investigadores de los centros de pensamiento del país en diferentes evaluaciones, algunos lo califican como un ligero repunte, otros como esperanza y otros ven el vaso completo ( medio lleno y vacío ), pero lo que sí coincide todos es que la tasa de inversión sigue muy baja, 14.7% del PIB), que es por debajo del 25% que ha tenido la economía colombiana. Todo porque no hay inversión ni en equipo, ni en maquinaria y esto tiene implicaciones fuertes especialmente en manufactura, como contundentemente se observa en su decrecimiento.
La contracción de la maquinaria fue el 3.3% año a año, y se ve reflejado en la industria manufacturera que está indudablemente en recesión por tener una contracción de cinco trimestres consecutivos. Lo preocupante también es que el crecimiento intertrimestral fue de apenas del 0.1%, lo que indica que un acuerdo nacional sobre la reactivación económica debe ser liderado inmediatamente antes de que, entre el mes de octubre, como señales de fin de año.
La inversión creció el 1.5%, sin embargo, no es la contracción del primer trimestre 2024 del 11.3% o del último trimestre del 2023 que fue el 33.8%, pero todavía sigue siendo baja para mostrar una economía creciente como pre pandemia. Positivo el crecimiento de la demanda interna, del 1.6% que veníamos con negativos anuales en cinco trimestres consecutivos.
Para destacar, el sector agropecuario, con un aumento del 10.2%, fundamentado en el cultivo del café y los cultivos agrícolas, la administración pública con un 4.8% y las actividades artísticas en un 11.1%, todo esto ante, una contracción de la industria del -1.6%, las comunicaciones -1.9%, la minería con el -3.3%.
Los problemas sociales seguirán con este muy bajo crecimiento económico donde hay todavía mucha incertidumbre en el país. Por ello, todos los analistas coinciden en la urgente necesidad de la reactivación económica. una Reforma Tributaria perjudicaría mucho el clima de creció que se vislumbró y la inversión generaría mayores preocupaciones.