La creación del área metropolitana del suroccidente Colombia ANSO de Cali, Palmira, Jamundí, Candelaria, Dagua, Puerto Tejada y Villarrica, irá a consulta popular para el 20 de noviembre del 2024, de tal manera que los ciudadanos decidan sobre esta integración territorial.  Para el voto de los ciudadanos de estos municipios, le presentamos:

Lo bueno

  • Integración regional, lograr una coordinación territorial efectiva entre los municipios para abordar problemas comunes que tienen que ver con el enlace regional vial, los ríos,  el agua,  la energía, el medio ambiente,  la seguridad, etc. Se podrá lograr mayor eficiencia en su ejecución.
  • Desarrollo económico. Al facilitar inversiones en infraestructura y servicios públicos, más medio ambiente podrían mejorar no solamente el sistema de acueducto y alcantarillado, energía solar, etc. y otros proyectos de iniciativa metropolitana, como parque inteligente, o un hub de inteligencia artificial, proyectos deportivos, recreativos, una Miami pequeña, las Vegas en su escala proporcional, etc.
  • Fortalecimiento de servicios públicos. Se pueden optimizar los recursos disponibles y mejorar cobertura.
  • Es urgente en estas ciudades tan violentas, con tanta influencia de grupos subversivos y delincuenciales que el jefe de la policía de cada municipio que es el alcalde, puedan estar integrados en un modelo metropolitano.

Lo malo

  • La desigualdad en el desarrollo. Reconocer que servirá para beneficiar desproporcionadamente a Cali en comparación con los otros municipios y esto podría tener las desigualdades económicas en el área metropolitana; ya Cali le entregó hace 60 años el área industrial a Yumbo, el área recreacional a Jamundí, hace 53 años el aeropuerto a Palmira y la vivienda masivamente se ha ido a Jamundí, Yumbo, Candelaria y algo Palmira.
  • Preocupaciones sobre autonomía. La normatividad constitucional y legal garantiza que cada municipio mantenga su independencia en la toma de decisiones. Pero hay que pensar que en 50 años Santander de Quilichao, estará conurbado con Buga, pasando 8 municipios, esa es una realidad, aunque no pierden su autonomía.

Lo feo

  • Problema histórico no resuelto. La ciudad de Cali no ha podido con el sistema de transporte masivo, ahora se mete con el tren de cercanías, ¿podrá? cuando todos los proyectos de la ciudad en los últimos 30 años han sido fracasados (Termoemcali, MIO, 21 Megaobras, Corredor Verde, “Mi Comunidad es Escuela” y los cinco parques de la anterior administración).
  • Adicionalmente Cali no ha podido solucionar desde hace seis años su normatividad en el desarrollo territorial interno, con un distrito especial creado mediante acto legislativo, ahora extrapola su desarrollo en el territorio. Sin tener un ordenamiento territorial y urbanístico acorde con las necesidades de esta ciudad.

La decisión sobre la conformación del área metropolitana del suroccidente colombiano es crucial para el futuro de desarrollo urbano y regional. ¿Cómo el alcalde de Cali podrá persuadir, ante tantas inquietudes reales sin resolver, para que sean abordados con seriedad por las otras autoridades locales y ciudadanas?

Hay necesidad de recursos financieros a nivel municipal y por supuesto en la nueva área territorial, con inversiones significativas, esta falta de recursos limitará la capacidad para llevar a cabo proyectos necesarios para el área metropolitana.

El punto de partida es definir una planificación estratégica que priorice la sostenibilidad, la equidad, el desarrollo económico y por supuesto ambiental.  No será importante que sus municipios integrantes se comprometan en un plan de desarrollo de largo plazo, para entender qué le va a pasar a Palmira y Dagua, por ejemplo, en un escenario de 20 años, etc.

Editorial