Tanto el sector público como el privado registró una deuda externa al cierre del 31 de diciembre del 2023 de 196.360 millones de dólares, según las estadísticas del Banco de la República, un aumento de 12.542 millones de dólares, que corresponde a un crecimiento del 8.5%.
La deuda externa es la cantidad total de dinero que adeuda un país al conjunto de las instituciones internacionales, donde el deudor pertenece a la economía de Colombia, mientras el acreedor está por fuera de ella. El endeudamiento que corresponde al Estado se llama deuda pública y a las empresas privadas y entidades privadas que se llama deuda privada, y su suma, deuda externa, que en Colombia se genera porque los ingresos gubernamentales o nacionales, son inferiores a los gastos, por tanto para cumplir con los objetivos de crecimiento e inversión, se asume como déficit fiscal recurriendo al endeudamiento externo.
Los acreedores son entidades financieras privadas, como bancos extranjeros u organismos de cooperación financiera como el Fondo Monetario Internacional, BID, Banco mundial, etc.
La deuda externa que tenía contratada el sector público al cierre del 2023 ascendía a 112.970 millones de dólares y representa el 30.9% del PIB, según Banrepública, pero al mismo tiempo corresponde al 57 % % de la deuda externa colombiana. Y el sector privado tiene unas acreencias totales de 83.390 millones dólares, que representa el 22.8% del PIB y un 43% de la deuda externa total colombiana.
En el corto plazo las obligaciones internacionales llegaron a 32.898 millones de dólares, el crédito comercial a 4.542 millones de dólares, préstamos del orden de 26.270 millones de dólares.
La primera característica del tercer mundo, es tener esa deuda tan alta como porcentaje del PIB, donde como la economía es débil, cubre un alto porcentaje del PIB y sus costos por supuesto son más altos. Colombia no debe llegar a situaciones de insolvencia y cesación de pagos, asumir que tiene un límite para no entrar en situaciones de insostenibilidad fiscal; se ha señalado que el límite de la deuda pública se situó en el 55.6% del PIB (Que fue en el 2023 US 393 mil millones) , espacio donde estamos llegando con el 53.7% y donde no debemos de llegar. Esa deuda externa tan alta es un sacrificio del gasto público, que afecta la justicia social, la educación y la protección social, porque se afecta más el presupuesto nacional para su destino. Y el déficit fiscal tiene un límite, proyectado por el gobierno para el 2023 e inserto en la aprobación del presupuesto anual de inversiones es del 4.7% del PIB (US 18.471 millones).
Y ese es el problema de Colombia, un PIB bajo (US 393 millones), que limita la deuda externa y el déficit fiscal, lo que afecta el desarrollo económico y social al generar a los 52.7 millones de colombianos, un PIB per cápita muy bajo, solo de US7.450, inferior a Costa Rica, Uruguay, Argentina, Chile o Panamá y muy inferior al PIB per cápita de España que fue de US 32.400