Tras renuncia de Marín, el Cali no tendría ningún nuevo refuerzo

Por Jaime Salazar el Sáb, 31/12/2011 - 1:44pm

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El pasado 28 de diciembre, como si de una inocentada se tratara, Fernando Marín, presidente del Deportivo Cali renunció por supuestos quebrantos de salud, dejando a la institución azucarera en la peor crisis en mucho tiempo, y ad portas de la revocatoria de su mandato, a realizarse en la próxima asamblea de socios, citada para el 20 de enero.

La junta directiva, que desde el primero de diciembre hasta ahora nunca se reunieron oficialmente, salvo en la temerosa reunión -no oficial- del pasado 14 de diciembre para la revocatoria, ahora tendrán que tomar las riendas del deportivo Cali, en el peor momento de su historia.

Respecto a la renuncia, el polémico directivo Ernesto Roa, declarado enemigo de Marín dijo al noticiero 90 Minutos: “Lo hizo en la peor época del año, lo cual demuestra otra irresponsabilidad más del Sr. Marín al mando.”

¿Qué pasará con Insúa?

En entrevista con 90 minutos, el polémica directivo Ernesto Roa dijo que había que tras la renuncia de Marín, había que hablar con Insúa, pues no se le traerían los 8 refuerzos que solicitó:

“Hay que hablar con Insúa, no va venir lavándose la manos, sino que tiene que asumir y tiene que responsabilizarse por tener el plantel en los primeros lugares”.

Con estas fuertes declaraciones sobre el técnico que tiene contrato por un año, la continuidad del técnico Rubén Darío Insúa está en entredicho, aunque el argentino, por estos días en su país, no ha dado declaraciones a la prensa.

¿Caras nuevas?

Las conversaciones con John Viáfara ya había sido adelantada y parece que llegará a buen término. Viáfara jugó con el descendido Deportivo Pereira, y es casi seguro para los verdiblancos en 2012.

A su vez, el directivo Ernesto Roa ratifica que por la difícil situación económica que atraviesa el deportivo Cali, no se traerán más jugadores para la temporada 2012, menos así, los delanteros internacionales que supuestamente había pedido Insúa.

“Los jugadores con brazos caídos, haciendo mala cara, no dejando todo en la cancha… eso no puede pasar. Ese puede ser un mensaje que se le debe dar al plantel cuando venga el 3 de enero”.